¿Conoces la historia de Hemingway y el bar Floridita?
Cuando viajé a La Habana lo hice llena de expectativas, no sólo por conocer los lugares históricos de Cuba, por caminar por su malecón, disfrutar de su playa, sino también por conocer de cerca a su gente.Y no me fui defraudada, esta ciudad con edificios que muestran el esplendor de épocas pasadas en contraposición a los edificios posteriores a la revolución, me sedujo totalmente.
Una tarde de caminata sin itinerario fijo, tomamos la calle Obispo y paso va paso viene nos topamos con el restaurante el bar Floridita, que se hace llamar la Cuna del Daiquiri, una hermosa esquina rosada, al que Hemingway allá por los años 40 hizo su lugar... digamos que era su oficina.
Allí lo visitaron escritores, artistas y hasta los Duques de Windsor y donde tenía un grupo de amigos cubanos con los que se reunía diariamente frente a un mojito o un daikiri; tanto es así que hay un trago que lleva su nombre.
Como no podía ser de otra manera, sin importar la hora nos tomamos en su honor un “Hemingway Especial” una variante del daiquiri al que él le suprimió el azúcar pero le duplicó el ron….rico pero fuerte, al menos para mí.
Autor:
Silvia Bollada
Curiosa incurable, psicóloga, madraza por naturaleza.... y soy de Barrio Norte
No hay comentarios.:
Publicar un comentario